Hace tiempo que empecé a pensar en abrir un blog de lo que ahora llaman "repostería creativa". ¿Otro de tantos? Sí, posiblemente, pero al menos es una manera de no perder las recetas que voy haciendo porque aunque siempre me baso en alguna encontrada por la red, tengo la manía de modificarlas (con más o menos fortuna) y luego no me acuerdo de cómo la había hecho! Memoria de pez ¡qué le vamos a hacer!
Para empezar no voy a colgar una receta, sino la foto de uno de mis primeros inventos presentables: las galletas que hice para el 93 cumpleaños de mi padre, el abuelo "Tommy". Partiendo de una fotografía suya de cuando era joven, pasé la silueta al fondant y la dibujé con pintura comestible.
Muy simple y... ¡resultón!
